Policías acusados de torturas en Salta quedaron al borde del juicio oral y público

Se trata de cinco agentes que habrían atormentado a dos jóvenes en una comisaría de Güemes a mediados de 2011. Los procesamientos son con prisión preventiva

Cinco policías de Salta quedaron al borde del juicio oral y público luego que  la Sala I del Tribunal de Impugnación de la provincia ratificara la acusación en su contra por habertorturado a dos jóvenes.

“La colocación de una bolsa plástica en la cabeza a una persona, de modo de impedirle la entrada de aire por las vías aéreas superiores es una de las prácticas de la más refinada y cruel de las torturas. Conocida como el ‘submarino seco’, sólo se parangona con su similar ‘el submarino’ que consiste en la inmersión de la cabeza en un cubo con agua”, señalaron los jueces Abel Fleming y Julio Pancio.

El hecho salió a la luz gracias a una filmación de celular que hizo otro policía, Roberto Barrionuevo, quien también fue procesado por el delito de omisión de denunciar el delito de tortura.

“Sólo quien impone la tortura sabe cuándo va a cesar la maniobra, y lo será antes de que se provoque la consecuencia fatal de la asfixia o del ahogo. Pero la perspectiva –desde la apreciación de la víctima-, es la de la concreta sensación de muerte. En su instinto de supervivencia, desesperadamente tratará de insuflar aire. Sin lesiones visibles y constatables clínicamente, esta tortuosa práctica de tortura provocará hipoxia temporaria, esfuerzo extraordinario al organismo y sufrimiento físico y psíquico descomunal”, detallaron los camaristas.

Los policías procesados con prisión preventiva son Matías Eduardo Cruz, Alberto Ontivero, Leonardo Serrano, Marcos Gabriel Gordillo y Héctor Raúl Ramírez, a quienes se acusa del delito de imposición de torturas.

Según la investigación, los hechos tuvieron lugar entre el 24 de mayo y 1 de junio de 2011, cuando dos jóvenes que habían sido detenidos fueron víctimas de tormentos por parte de los efectivos.

“Frente a la envergadura de este ataque, los golpes físicos con secuelas de lesiones pueden parecer un bálsamo para el torturado que pasó por este tipo de experiencia”, evaluaron los camaristas.

Fuente: infobae.com