Nadie sabe explicar el misterio de los remolinos en el paraje Puna

La primicia de EL LIBERAL, sobre el inusual acontecimiento tuvo una enorme repercusión en los medios nacionales que consultaron insistentes de lo que mantiene en vilo a los pobladores de la zona. 

Mientras tanto, técnicos en agronomía y meteorólogos hablan de factores climáticos asociados con la erosión eólica, aunque coinciden en que antes de dar un fallo contundente será necesario hacer un estudio meticuloso de la situación. 

Por su parte, los lugareños apelan a sus creencias influenciadas por sus antepasados para tratar de darle sentido a lo que a diario padecen en carne propia, al punto tal de que algunos ya están pensando en abandonar el paraje. 

Inta Quimilí 

El jefe de la Estación Experimental del Inta en Quimilí, Ing. Miguel Perotti, fue uno de los primeros en intervenir en el tema, tras tomar conocimiento del suceso a través de EL LIBERAL. 

Ya con los informes de técnicos de la estación experimental en su poder, el funcionario expuso su opinión como profesional: “Lo mío es una apreciación que de ninguna manera es concluyente y respeto las creencias y maneras de pensar de la gente del lugar, porque cada uno tiene su forma de ver esto. Para nosotros no es más que un factor natural que se produce cuando se da determinada cantidad de factores que lo favorecen”. 

Y agregó: “Es un lugar que está en área que no tienen cobertura, es suelo suelto, eso se combina con que en estos momentos hay baja humedad en los suelos y alta temperatura por la época del año, uno de los factores pueden ser que esos calores producen lo que nosotros llamamos corrientes convectivas, es decir, cuando el aire que se calienta mucho a nivel del suelo y trata de buscar altura para encontrar zonas de menor temperatura y en esa elevación levanta el polvo del suelo, pasa lo mismo cuando se hacen pulverizaciones a determinadas horas del día, que en lugar de bajar al cultivo termina elevándose”. 

“Otro de los factores que pueden confluir –prosiguió- es que tenemos cortinas de árboles a determinadas distancias, eso a veces hace encaminar el viento en una dirección, el viento se levanta cuando se encuentra con la cortina y vuelve a bajar contra el suelo y cuando no hay protección en el suelo produce la erosión que levanta ese polvo”. 

De todas formas, consideró que para determinar la verdadera causa tendría que hacerse un estudio profundo. 

No descartó que esto tenga relación con un incendio forestal ocurrido recientemente, que destruyó la cobertura del suelo, como tampoco con el impacto del laboreo de la tierra agravado por las desfavorables climáticas.